IMÁGENES DE VESTIR O IMÁGENES DE «CAP I POTA”

Las imágenes de Los «cap i pota” son parte de la llamada imaginería religiosa popular y en ellas se incluyen todas las expresiones artísticas de la historia del arte que, inspiradas en el tema religioso como base, son realizadas de manera espontánea, sin estar condicionadas ni sujetas a ninguna normativa académica y no siguiendo parámetros estilísticos de escuela, región o zona.

Son, en esencia, imágenes devocionales llevadas en procesión o usadas en casa. 

ESTRUCTURA DE UNA IMAGEN DE VESTIR 

Las partes visibles de éstas imágenes (normalmente cara y manos) van ensambladas a una sencilla estructura de madera, o al cuerpo tallado o a medio desbastar que no se plantea ningún tipo de “preocupación estética”. Sin embargo, la cabeza, las manos y, en algunas piezas los pies, son de madera tallada y trabajada, recubiertos de una fina capa de estuco y delicadamente policromados.

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cap i pota

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Los brazos y antebrazos suelen estar unidos al cuerpo por alambres y las piernas se sujetan al faldón por medio de clavos que les da estabilidad y permiten su movimiento. Encontramos algunas imágenes (sobre todo en aquellas tallas anteriores al siglo XIX) en las que los hombros, los codos, las rodillas y las manos, solían ser articulados; esto permitía disponer la figura en distintas posiciones. Además, esta estructura móvil permitía vestir a la figura de manera más sencilla, lo que facilitaba este trabajo y permitía un cambio de vestuario más continuo.

Estas imágenes vienen definidas por su rostro y manos, es decir, por sus partes visibles. La zona “oculta” por los ropajes no presenta anatomía concreta, por lo que los bustos y cuerpo no presentan atributos físicos de carácter sexual siendo iguales para hombres y mujeres.

TIPOLOGÍA Y TEMÁTICAS

Se plantea, por tanto, una infinidad de figuras religiosas (siempre y cuando vayan vestidas) y de los más diferentes tamaños. Encontramos Inmaculadas, Dolorosas y toda la variedad de Santos y Santas. Así mismo se plantean en las distintas posiciones acorde a su iconografía: de pie, sedentes o arrodillados.

EL TOQUE FINAL: ROPAJES Y PEANA

Si por algo destacan estas imágenes es por una destacada majestuosidad de sus vestidos, planteando ricas telas como seda o terciopelo y el uso sistemático de la plata y el oro de sus coronas, símbolos y atributos. La riqueza de las telas y atributos dependerá del soporte económico del encargo, pudiendo alcanzar límites casi increíbles para algunos.

Primeramente se cubren con telas rústicas que proporcionan volumen a esos cuerpos planteados como simples troncos desbastados sobre las que se superponen las distintas telas por capas que conforman el vestuario, planteado incluso con posibilidad de cambio según la ocasión lo requiera.

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A algunas de ellas incluso se les añaden pelo (natural en muchas ocasiones) que marcan una búsqueda de imitación de la realidad y naturalidad, enfatizado con ojos de cristal en algunos ejemplos.

Las peanas sobre las que se apoyan suelen ser de madera pintada o de madera cubierta con pan de oro. Al ser una parte que se ve al exterior se plantea de distintas formas cuadradas, redondas, hexagonales, octogonales y muy cuidadas para completar de manera armónica el conjunto.

Imágenes: Todocolección/pinterest

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