EL ARCÓN, UTILIDAD EN ESENCIA

El arcón es la pieza de mobiliario más antigua que se conoce (existían desde tiempos de Egipto). Las arcas europeas eran troncos de árbol que se dejaban huecos y, hasta el siglo XIII, no se hicieron con tablas unidas con clavos. 

Arcón con cerradura. Siglo XVII

Será en la Edad Media cuando más importancia va a tener esta pieza. Como consecuencia de la vida itinerante del hombre medieval, se plantea la necesidad de un tipo de mueble portátil. Eran muebles de “fácil” transporte que se utilizaban para guardar objetos de la casa (vajillas…) y ropa, incluso como caja fuerte con cerraduras muy elaboradas para guardar también el dinero.

Aunque es en la Edad Media cuando más importancia tienen, en el Renacimiento es cuando se convierten en piezas de gran valor, gracias al lujo de las formas talladas. Durante el s. XV se desarrollaron nuevas técnicas de construcción y se hacían con artesonado o ensamblado utilizando caja y espiga. Se embellecían para que resultasen más vistosos y agradables a la vista, usando las propias maderas de las que estaban hechos (sin añadidos).

EL ARCÓN DE NOVIA


Arcón de novia turco de finales del siglo XVIII

En el Renacimiento se continúa la estructura básica del arcón medieval, pero entonces como símbolo de lujo y ostentación, utilizado sobre todo como regalo de bodas, ya que se usaba para guardar la dote de la novia. Adopta entonces formas de clara influencia arquitectónica clásica con reminicencias a la estructura de los sarcófagos romanos.

DECORACIÓN BARROCA y SIGLO XIX

Aunque siempre prima su funcionalidad, durante la época barroca aparecen ya piezas profusamente decoradas por sus caras principales y con añadidos dorados y marquetería, así como patas con formas e interiores y cerraduras ampliamente decorados.

Arcón de roble tallado. S. XIX

En el siglo XIX impera en este tipo de piezas el eclepticismo, aunque hay una decadencia clara con respecto a otros muebles como la cómoda que continuará hasta nuestros días. Encontramos piezas con claras reminiscencias a estilos pasados (los denominados estilos “Neo”) con piezas que imitan a piezas de estilo Renacenctista o Gótico, piezas con formas toscas estilo medieval y guiños a figuras antiguas como Cristobal Colón o los Reyes Católicos.

EL PROBLEMA DE LOS ARCONES Y SU DECADENCIA

Los arcones tienen un gran inconveniente y es que es complicado llegar a las cosas guardadas al fondo. Para ayudar en ese problema se planteó en algunas piezas incorporar cajones al fondo, iniciando ya en el siglo XVI un precedente de la CÓMODA, mueble que le quitaría definitivamente conforme pasan los años la primacía en las casas a este primer mueble.

Actualmente siguen siendo piezas coleccionables, fruto de una clara nostalgia a tiempos pasados más que una búsqueda de utilidad.

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