Lo primero que debemos comentar es que: Conservar y Restaurar no es lo mismo. Por un lado están las actuaciones para Conservar en buen estado las obras y, por otro, la corrección de alteraciones sufridas por una mala conservación; la Restauración.
¿Cómo lo hacemos?
La primera norma que no está propiamente “escrita”, pero lo que debemos tener presente es el sentido común.
No tener las obras a temperaturas extremas de frío o calor, aunque sea temporalmente. Por ejemplo, no ponerla cerca o encima de radiadores, chimeneas o del aire acondicionado, esto podría provocar una plaga de moho y hongos.
Que no le dé directamente la luz del sol, sobretodo si tiene pintura. Piensa en las cortinas de tu casa como amarillean y como es casi imposible que vuelvan a su color original.
Exposición a la luz.
Conservación preventiva para todos. Guía ilustrada
Miguel Cuba Taboada
Cuidado cómo lo limpias. Para limpiar es mejor con algo muy suave, como un plumero y mucha delicadeza. Ten cuidado si tiene pintura y tiene alguna falta, porque se puede enganchar y acabar de caerse más escamas. Si ves que está en mal estado mejor déjalo en manos de profesionales.
A la hora de manipular la obra, hacerlo despacio y con suavidad.
Manipulación de objetos
Conservación preventiva para todos. Guía ilustrada
Miguel Cuba Taboada
No tener restos de comida cerca y, menos, limpiar con patatas, como popularmente se sigue creyendo, ya que esto podría ser un caldo de cultivo para insectos y microorganismos.
Si vas a guardarla en algún sitio, hay que tener en cuenta algunas cosas, como por ejemplo con qué la envolvemos, ya que meterlas en bolsas de plástico (y por general, materiales que no transpiren) pueden crear un microclima propio, con humedades y aumento de temperaturas. Las obras suelen estar compuestas de materiales “vivos” como madera, tela, marfil…etc., y éstos necesitan respirar.
En este apartado es importante hacer una especial mención a las obras con soporte celulósico, como papel o cartón. Si vas a guardar por ejemplo una fotografía o una acuarela en general el material de base suele ser con un Ph ácido, lo que acelera muy rápido su degradación, por eso es conveniente ser especialmente sensibles con estos materiales y envolverlos con algún tipo de tejido o papel neutro (absorviendo así parte de esa acidez) y, también, guardarlos donde no lo le dé la luz, a ser posible.
Conservar las piezas
Conservación preventiva para todos. Guía ilustrada
Miguel Cuba Taboada
En todo caso, si descubres que tu pieza no se encuentra en buen estado es mejor hablar con un profesional, ya que si lo dejamos puede aumentar su mal estado o, si intentamos seguir algunos métodos recomendados por Internet, lo más seguro es que le vayamos a hacer más mal que bien. Al fin al cabo no queremos convertir nuestras piezas en el nuevo Ecce Homo 😉
Incorrecta manipulación con las piezas
Conservación preventiva para todos. Guía ilustrada
Miguel Cuba Taboada
Para más información/Bibliografía
https://www.arte-restauracion.es/conservar-obras-de-arte-correctamente-recomendaciones/
http://ge-iic.com/files/grupoconservacionpre/CONSERVACIONPREVENTIVA.pdf
http://www.aecid.es/Centro-Documentacion/Documentos/documentos%20adjuntos/MANUAL%20DE%20GESTION%20bj%20on%20line.pdf